Es en el momento de las grandes transformaciones históricas que aparecen los grandes traidores de la Historia, así nos encontramos a Caín, Lucifer Judas, Brutus, Chang Kai-shek, Santander, José A Páez, Pinochet, Teodoro Petkof, Ismael García, Micheletti, Henry Falcón etc. Ellos, si no cambiaron el curso de la historia, si obstaculizaron su desarrollo y con sus acciones marcaron su diferencia abismal con los que convirtieron la lealtad en su sentido de la vida. Ya en la antigua Roma se decía que “Roma usa a los traidores, pero los desprecia”, hoy parafraseando esa visión se podría afirmar que los pueblos no usan a los traidores y con fuerza los desprecian.
La traición nace de una deformación de la personalidad y del carácter que sobrepone la individualidad a cualquier obra colectiva y que no conoce la amistad, la nobleza, la lealtad, la humildad, la solidaridad, el bien común, el amor, la obra colectiva. Sin embargo, se presenta como cada una de ella y trata de convencer a los demás de la certeza de sus expresiones.
El traidor parte de una sobrevaloración de sus potencialidades, usa con cuidado las palabras, según quiénes se encuentren presente y el lugar donde las expresa, se encuentra en lugares cercanos al jefe, para estar atento a sus indicaciones y sobre todo a sus necesidades personales, puede ser en extremo exigente con sus subordinados, usa el mismo lenguaje del jefe, o intenta a sus espalda desprestigiarlo, nunca asume sus responsabilidades y las descarga en otros, acepta toda indicación superior y obstaculiza su cumplimiento, enlenteciéndola, tergiversándola y haciendo caer la responsabilidad de su incumplimiento en los subordinados, hace valer sus méritos por encima de los demás, aunque no lo merezca, se cree poseedor y merecedor de todos ellos, busca ubicarse en los lugares claves del proceso de toma de decisiones para desde ahí ubicar mejor el momento de la traición.
En la Historia de Venezuela se recogen innumerables pasajes sobre traiciones tanto a hombres insignes y glorias nacionales, como a individuos y agrupaciones políticas, las más paradigmáticas y negativas para el desarrollo de la nación, se tejieron en torno al Libertador y luego la siguieron las que frustraron el movimiento zamorano de la década del 50 del siglo XIX. El siglo XX comienza con la traición de Juan Vicente Gómez a Cipriano Castro y así hasta llegar a la segunda mitad de ese siglo, cuando se firma el Pacto de Punto Fijo y en él se excluyen, los obreros, el movimiento popular y los militares y con posterioridad a esta traición, será difícil desentrañar lo ocurrido con el movimiento popular que nace en 1958, el auge y desintegración de la izquierda en los años sesenta y setenta, el fracaso de los movimientos militares del año 1992, el golpe de estado del año 2002 y el paro petrolero del mismo año, hasta el más reciente del 2010 en la que se involucran individuos y agrupaciones que se presentan como iguales, pero distintos al proyecto revolucionario y finalmente se desmarcan como lo contrarios a las necesidades del pueblo.
En cada uno de estos hechos existe un denominador común: la oligarquía venezolana y su capacidad para ser manipulada por las potencias extranjeras y en especial por Estados Unidos. La oligarquía venezolana tiene el inglorioso mérito de ser la que, en la historia mundial del desarrollo capitalista, disponiendo de los recursos necesarios para la acumulación capitalista no lo alcanza, por el contrario lo transfiere a las potencias mundiales y se conforma con repartirse el presupuesto nacional. El análisis de esta oligarquía y su comparación con otros países permite concluir que es la oligarquía más desnacionalizada de todas las existentes y por tanto, la primera gran traidora a los intereses y necesidades del pueblo venezolanos, se le puede añadir como rasgos de su personalidad grupal, su flojera o repudio al trabajo, su avaricia a costa del dinero saqueado al presupuesto nacional, su vagancia intelectual, su cortedad de visión, su incapacidad para la creación política y económica y por tanto su carácter repetitivo, insulso, soez, en este sentido se puede concluir que ella padece de una minusvalía mental de contenido genético.
Esta caracterización de la psicología política de la oposición condujo a irradiar sus nefastos contenidos a determinadas agrupaciones políticas, así como a determinados sectores populares de la sociedad venezolana. Es contra estos factores que se debe luchar en el proceso de construcción de la sociedad socialista.
PREGUNRAS GENERADORAS
1. Quiénes traicionaron los ideales bolivarianos y juntos a ellos quiénes fueron los verdaderos traicionados.
2. Qué buscaban los líderes políticos de las diferentes etapas de la historia venezolana que se traicionaron unos a otros y traicionaron al pueblo. Qué participación tuvo en ello el pueblo de Venezuela.
3. Cuánto aportaron al progreso humano y a la justicia social las diferentes traiciones cometidas contra el pueblo venezolano.
4. Quiénes fueron estos traidores, con cuáles bases populares contaron, quiénes fueron los beneficiados de estos actos.
5. Destaque o identifique las diferentes formas en que se puede traicionar los ideales del pueblo y de la Revolución.
Equipo de investigación
Frente Francisco de Miranda
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