Ernesto Villegas: Es necesario rescatar el rigor en el periodismo

Es media tarde, apenas acaba de almorzar y apurado porque tiene una entrevista, la pauta lo espera en la redacción del diario que dirige Ciudad Caracas, llega con una sonrisa, se disculpa por los minutos de tardanza y se sienta a ocupar con la mejor disposición un lugar que no le es habitual, el de ser ésta vez el entrevistado. Ernesto Villegas reconocido periodista venezolano autor del libro Abril Golpe Adentro, nos conversa de los retos, de las fallas, de lo que hay que hacer, lo que se ha dejado de hacer y lo que falta por hacer en un oficio que carga sobre sus hombros la responsabilidad de informar.

PG: Capitalismo y comunicación ¿un matrimonio en decadencia?

EV: El capitalismo está haciendo crisis en todas partes, el periodismo objetivo del cual el mismo se valió para conservarse y prologarse ahora se le convierte en un estorbo, y hasta subversivo, por eso es que cada día más medios del capitalismo trasgrede sus propios mandamientos y principios, vemos como hay una alteración generalizada de los géneros periodísticos, como se dan fenómenos de manipulación y engaño abiertos, se dan noticias prefabricadas, montajes cómo el que ocurrió en Venezuela los días de abril, entre otros más. El tratamiento absolutamente irresponsable de las armas de destrucción masiva en Irak que dieron pie a que un país fuese invadido y un gobierno derrocado y al final nunca hubo tales armas. Los medios de comunicación están ahí, toda una industria de la comunicación, puesta al servicio no de la verdad, sino de los intereses políticos, económicos y militares específicos.

PG ¿Está en crisis el periodismo?

EV: Hay muchas cosas que le reconfortan a uno, el entusiasmo y la pasión que tienen muchos periodistas profesionales y muchos que no lo son, periodistas comunitarios, alternativos que dan una lucha por la verdad, sin embargo no deja de ser un momento crítico para el periodismo en Venezuela, ésta crisis no está solamente en el periodismo de derecha, nosotros también somos expresión de esa crisis, excluirse sería un engaño.

El periodismo todavía tiene mucho que criticarse y todavía falta mucho por hacer en la construcción de un modelo alternativo al periodismo capitalista, es una tarea pendiente, es un proceso que demanda mucho, no es sencillo entre otras cosas porque es hecho por seres humanos y los seres humanos somos expresión de nuestro tiempo, nos habita también el germen de la crisis que padecemos.

PG: La polarización y el periodismo

EV: Tomar partido no significa abandonar el rigor, en general al periodismo le hace falta rigor, tu puedes leer un texto de un periodista sea de derecha o de izquierda pero si es riguroso, tú a sabiendas de cuál es la intencionalidad, el filtro ideológico por el que pasa, puedes identificar lo veraz de lo no veraz, pero muchas veces eso se desquicia. El usuario tiene derecho a estar oportuna y verazmente informado, porque la crisis se hace presente, es difícil para el ciudadano estar informado, tiene que apelar a la diversidad de fuentes, por eso yo hago un llamado glamoroso a todos los que estamos involucrados en este oficio, el de informar y comunicar con rigor, el ciudadano tiene ese derecho y a veces se incumple, porque en medio de esta crisis del periodismo nosotros no hayamos la manera adecuada de garantizarlo, porque estamos bajo muchísimas presiones, con las mejores intenciones, con todo lo que nos anima a veces no logramos estar a la altura de las exigencias de la gente.

Rigor versus objetividad

No hablo de objetividad sino de rigor, no puedes poner en la boca de otro algo que no dijo, si un asesino mato a cuatro, fueron cuatro no veinte, parece sencillo pero ésto muchas veces se tiene que repetir hasta el cansancio. Hay como una dejación en el periodismo con respecto al rigor por las motivaciones que sean.

Mucha gente justifica la falta de rigor por un objetivo político, vamos a ponerles esto o aquello, no me preocupo de precisar tal o cual dato, dejando de lado los elementos que forman parte del rigor, que tiene que poseer la comunicación, es grave y lamentable. Por eso es que yo insisto a que rescatemos el rigor con el que se informa.

PG ¿Los periodistas protagonistas de la historia o comunicadores de lo que sucede?

EV: Otra de las distorsiones que tenemos, es que nosotros los periodistas, los comunicadores en general, se nos alborotan los egos porque la televisión nos hace famosos, porque la gente nos reconoce en la calle o nuestro nombre aparece en un libro, entonces somos especialistas en todo y en nada a la vez, cuantificamos y hacemos pronósticos, por ejemplo periodismo de pronóstico, un periodismo que pronostica qué cualidad tiene un periodista para saber que va pasar esto o lo otro, tú puedes hacer un análisis o unas advertencias, anticipar escenarios, pero aquí se hace periodismo de pronóstico, como si fuéramos Hermes el iluminado.

Tal vez me agarraste en un momento muy crítico del oficio, pero yo creo que nos hace falta que todos nos reconozcamos como parte de la crisis, que en lo que hacemos hay una cuota de la crisis.

¿Estamos viviendo la democratización del periodismo?

Es un fenómeno muy esperanzador para el futuro de la comunicación, mucho de esos comunicadores llamados comunitarios o alternativos, tienen un entusiasmo y una pasión por el arte de comunicar superior a muchos de los que tenemos un carnet que nos acredita como tales y eso es algo que nosotros tenemos que aprender, sin embargo yo creo también que lo que el periodismo ha conseguido en su especialización en las herramientas que ha desarrollado debe también ser aprovechado en el campo de la comunicación popular alternativa.

Todo el mundo independientemente que tenga o no estudio tiene el derecho a comunicarse, aquí en este periódico que yo dirijo se publican notas con la firma de gente de las comunidades al lado de las firmas de periodistas que tienen carnet por ejemplo, yo creo que ese es el camino, pero eso tampoco debe confundirse con la apología de la impericia institucionalizada en el campo de la comunicación, por eso mismo de lo que hablaba del rigor, pero claro ¿qué pasa? que los periodistas nos hemos encargado de desacreditar tanto en nuestros oficio que entonces claro cualquiera se siente con la capacidad de hacerlo mejor que un periodista que ve en televisión diciendo barbaridades, pero resulta que detrás del mundo de la comunicación hay todo un acervo practico teórico que no debería perderse, siendo la comunicación tan delicada, tan impactante que puede conducir a que un país lo destruyan o a destruir la reputación de una persona, tenemos unas responsabilidades tan grandes y debemos tener conciencia de ellas.

PG: ¿Qué opinas de quienes defiende el academicismo por encima del oficio?

EV: Es la noción corporativa de un club exclusivo, de gente que es capaz de hacer una cosa por ejemplo. Pienso que hay que revisar muchos esos conceptos de exclusivismos.

Inmediatez: ya ni siquiera es que tu amor es un periódico de ayer es que este es un twitter de hace tres horas

Nosotros a veces nos olvidamos de que estamos escribiendo la historias que van a leer nuestros hijos y nuestros nietos, y estamos sumidos en el inmediatismo ya ni siquiera es que tu amor es un periódico de ayer es que este es un twitter de hace tres horas que ya no es noticia, ya hay 150.000 después de ese, ese ritmo frenético que nos hace sentir que estamos informado y realmente estamos más desinformados de lo que nos rodea, sabemos cual fue la última declaración el último escándalo, pero no entendemos de petróleo por ejemplo, hace falta periodismo de investigación, hace falta formación. Deber existir instancias de formación para los periodistas en ejercicio, sean o no graduados.

PG: ¿Cuál es el secreto para contar una buena historia desde el punto de vista periodístico?

Que sea una buena historia para el periodista, que la historia te conmueva a ti mismo, porque si a ti mismo no te emociona, no te estremece te va a resultar un casabe que no llega ni a galleta de soda, te tienes que involucrar y comprometerte tanto en lo que estás haciendo, en el mundo que te rodea en los fenómenos culturales de tu tiempo para tu trasmitir algo que sea de interés, sino vas a sustituir eso con otras cosas.

PG: ¿Cómo ves el panorama electoral?

Es tremenda la subestimación que hacen muchos de los medios privados de la fuerza política que tiene el presidente y a veces se le invisibilidad, como sucedió el día de la inscripción de la candidatura de Chávez en el CNE, remitieron la concentración bolivariana a una movilización exclusiva de funcionarios públicos, pudiera pasar como una negación de la realidad, pero también es peligrosa porque tiende a crear las condiciones para la denuncia de un eventual fraude, a mi me preocupa que ahora se están viendo cada vez más frecuentes pedradas al árbitro electoral y eso puede ser presagio de un plan b, en el que la fuerza de la derecha derrotadas electoralmente se vean tentadas por la posibilidad de un salto al vacío, una patada a la mesa a ver que sale, para tratar de manchar el triunfo de Chávez, es peligroso y ojalá que las fuerzas democráticas que habitan ese conglomerado heterogéneo que es la oposición, impongan una agenda electoral y no se dejen arrastrar por un escenario como el que ya hemos vivido con el golpe, las guarimbas, el sabotaje petrolero, el retiro del año 2005, ojalá la tentación de controlar gobernaciones y alcaldías en las elecciones que vienen en diciembre y abril, les hagan mirar las cosas con más calma y no se dejen llevar por los cantos de sirenas, como diría Manuel Rosales.

PG: ¿Cuál es el reto del Periodismo en Venezuela?

En Venezuela está en juego mucho más que el periodismo, yo no miro al mundo sólo a través de los ojos del periodista, el reto para los venezolanos y las venezolanas es que aquí la revolución venezolana continúen su marcha y se profundice con una contundente victoria el 07 de octubre, ese es el reto que yo veo para Venezuela, ese es el primordial.

Para el periodismo que es mi oficio me parece que en medio de esos grande desafíos, su desafío particular es la apuesta al rigor en medio de la confrontación, que haya un periodismo revolucionario y militante con rigor y ojalá pueda haber un periodismo que ejerzan los colegas de la derecha con rigor, que podamos tener unas reglas mínimas de credibilidad independientemente de la visión ideológica que se tenga.

El lado humano detrás de la figura pública

PG: ¿De no ser periodistas que serías?

EV: Sería ingeniero electrónico, yo estudié en una escuela técnica, soy técnico industrial mención electrónica, yo quería estudiar eso, no quería seguirle los pasos a mis hermanos, quería tener mi propia personalidad, yo era un adolecente y como tal era rebelde, entonces me sacaba la piedra que me preguntaran ¿y tú que vas a estudiar, también periodismo?, yo decía: no yo soy yo, hasta que un periodista veterano me lo preguntó de una manera diferente, me preguntó por qué no me gustaba el periodismo y cuando empezó a indagar si sobre me gustaba, me hizo hacerme la pregunta, y se lo agradezco a él y a mis hermanos todo lo que he aprendido de ellos.

PG: ¿Te gustaría que tu hijo siguiera tus pasos?

La verdad es que no, hay ya muchos periodistas en esta familia, pero él será lo que quiera ser, que sea lo que le gusta, si va ser albañil que sea un buen albañil, lo importante es hacerlo bien, hay que ser un republicano en el sentido robinsonaeno.

PG:¿Los Villegas una familia en confrontación?

EV: Nosotros en esta familia estamos habituados a la confrontación a la discusión, mi papá fue dirigente del partido comunista y mi hermana Esperanza se fue con el MAS por ejemplo, y esa fue una división muy fuerte, sin embargo papá siempre la respetó. En mi familia siempre ha habido divergencias, pero nosotros nos queremos mucho, yo creo que uno de los principios es que los hermanos no hablamos de los hermanos, sino que nos hablamos entre nosotros y lo otro es que siempre hay alguien que con humor resuelve cualquier situación de tensión, nunca falta alguien que haga un chiste y seguimos palante.

Fuente: Patria Grande