La presidenta brasileña, Dilma Rousseff, se solidarizó hoy con su homólogo venezolano, Hugo Chávez, quien el jueves reveló en La Habana que se somete a un tratamiento médico para un cáncer, y resaltó el “coraje” del mandatario para afrontar los “momentos difíciles”. “En nombre del Gobierno brasileño quiero enviarle votos para un pronto restablecimiento (de su salud)”, declaró en un comunicado la gobernante, quien en 2009, un año antes de las elecciones que la llevaron al poder, padeció un cáncer linfático que según sus médicos ya fue curado.
“En los momentos difíciles por los cuales todos pasamos es importante no sólo el cuidado de los médicos, sino también el coraje personal y la solidaridad de los amigos. El coraje no le falta, presidente Chávez, y esté seguro de que no le faltará también la solidaridad de todos los amigos. Un fuerte abrazo”, agregó Rousseff.
El presidente venezolano rompió el jueves por la noche la incertidumbre sobre su estado de salud en una alocución al pueblo venezolano desde la capital cubana, en la que se encuentra desde hace tres semanas.
Chávez reveló que ha sido sometido allí a dos intervenciones quirúrgicas, la segunda de ellas para extraerle un “tumor abscesado” con presencia de células cancerígenas.
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